U. de Chile digitalizará patrimonio musical de Olivia Ulloa, cultora folklórica de Peñalolén

La Facultad de Artes, a través del Centro de Documentación en Investigación Musical del Departamento de Música, realizará un trabajo de digitalización y puesta en valor del material de la folklorista de 85 años. “Con este proyecto aportamos a la visibilización del laborioso y relevante trabajo de Olivia Ulloa”, señala la académica y actual directora del Archivo Central Andrés Bello, Fernanda Vera, a cargo de este proceso.

A inicios de año, la Corporación Cultural de Peñalolén y la Facultad de Artes de la U. de Chile firmaron un convenio para que dos estudiantes de cuarto año de Teoría de la Música, Benjamín Díaz y Camilo Escudero, al alero del Centro de Investigación y Documentación Musical del Departamento de Música (Cedim) realizaran un trabajo inicial de conservación primaria y digitalización selectiva del archivo de Olivia Ulloa, emblemática folclorista de la comuna. 

De este modo, el equipo de trabajo liderado por la académica Fernanda Vera -también directora del Archivo Central Andrés Bello- hará un trabajo de digitalización selectiva y puesta en valor de esta enorme colección de música chilena e interpretada en Chile reunida durante varias décadas.

Las materialidades de los registros incluyen discos compactos y casetes con producciones fonográficas, entrevistas y presentaciones en vivo, además de más de un centenar de cuadernos donde ha anotado cerca de once mil canciones del repertorio nacional, en muchos casos con la letra y los datos esenciales de cada tema, además de refranes y otros temas de interés.

“Este acuerdo releva la misión de nuestra Universidad, trabajar la cultura con las personas que hacen la cultura”, dijo en esa oportunidad el decano de la Facultad de Artes, Fernando Carrasco.

 

Patrimonio popular 

Como explica la profesora Fernanda Vera, este proyecto nace de una iniciativa convocada por la gestora de la Facultad de Artes Erika Valdés. “Ella nos invitó a realizar una primera visita preliminar para determinar inicialmente el potencial de la colección y emprender acciones preventivas para su conservación y custodia”, detalló la profesora del Departamento de Música.

El valor de este material radica, “por un lado, en que es el primer archivo que da cuenta de un período posterior al de la Nueva Canción Chilena. Si bien el Archivo Sonoro de Música Tradicional, custodiado en el CEDIM, cuenta con piezas de los primeros 80 años de la idea de folclor musical en Chile, la colección de la señora Olivia, por su magnitud y amplitud, corresponde a una continuación de un período inmediatamente posterior que no contaba con fuentes sistematizadas para su estudio. Es decir, ejemplifica ampliamente los 55 años posteriores”.

Esta colección, que consta de más de 11.000 canciones, “dialoga con una descripción de archivo y sus correspondientes tipologías, creadas por la propia señora Olivia. Es tan rico el acervo como su organización, pues no es común acceder a archivos de mujeres de este nivel de detalle en el registro”.

Como detalla la profesora Vera, esta colección consta de canciones referenciadas en cuadernos clasificados según géneros, más su correspondiente registro sonoro debidamente etiquetado según instancia y fecha.

Un proceso en curso

Actualmente, el equipo está procediendo a la digitalización de los cuadernos manuscritos, que actúan a modo de inventario y de archivo, pues permiten ubicar y relacionar las canciones entre sí y acceder a los registros correctos. Posteriormente, con el catastro de los registros sonoros hechos, se entregarán estos resultados a la Municipalidad de Peñalolén que son quienes, en conjunto con Olivia Ulloa, determinarán su forma de acceso a toda la comunidad. 

Para este trabajo el proyecto está integrado por dos estudiantes de Licenciatura en Teoría de la Música como ayudantes de investigación. “Ellos realizarán las labores selectivas de digitalización de los cuadernos donde se han ingresado las canciones según la clasificación de la señora Olivia y también realizarán el catastro de todos los registros sonoros. Finalmente, el equipo asesorará en labores de conservación primaria que permitan la existencia del fondo hacia el futuro”, cuenta la profesora Vera.

La voz de la artista y su proceso de recopilación

Como relató Olivia Ulloa, su aproximación más concreta al canto popular se inicia “cuando era apoderada del colegio Regina Pacis, hace más de cincuenta años”. En esa oportunidad entró al grupo folklórico. Luego, en los 70, “empecé a armar mi colección con casetes (…). Poco después tuve una grabadora y con ella iba a las presentaciones de los grupos, registraba la actuación y si había alguna canción que me gustaba y no conocía iba al camarín y les preguntaba. Llegaba a la casa y todo lo pasaba a los cuadernos, eso también está en la colección”.

En ese ejercicio, cuenta, “fui entendiendo que tan importante como la canción eran todos los datos: el autor, el texto, la informante si era una canción folklórica, el año de alguna grabación”. Después de los casetes siguió con los programas de radio. “Era tanto el fanatismo que grababa dos programas en dos radios distintas si salían a la misma hora. Tomaba nota de lo que me parecía importante y así hice 100 cuadernos con la lista de canciones y las letras”.

Luego, cerca de los años 2000, “me di cuenta que estaba malo mi sistema, porque tenía todo revuelto en cinco o seis cuadernos en cualquier orden y me costaba mucho trabajo encontrar el material que andaba buscando. Así que decidí hacerlo todo de nuevo: un cuaderno para tonadas, otro para valses, otro para cuecas y cada uno con un índice, traspasé el material de los antiguos a los nuevos durante varios meses y terminé con cerca de cien cuadernos, con canciones, letras y datos”.

Sobre el trabajo de su material por parte de los equipos de  la Universidad de Chile, la cultora releva “que quede a disposición de toda la gente, que pueda ayudar al resto porque no sirve de nada tener las cosas en estantes”. Luego, espera que el material quede en la Casa del Folklorista de Peñalolén.

Conoce más de la historia de Olivia Pizarro en el siguiente testimonio disponible en la web del Departamento de Música. También, en el mini documental desarrollado por la Corporación Cultural de Peñalolén:

FUENTE: U. de Chile.